«El erotismo es un concepto que lo integra todo»

Show foofetish en el Salón Erótico de Barcelona 2015

Hipocresía es la palabra que ha usado el Salón Erótico de Barcelona (SEB) como eje de su anuncio de este año. No es casual, los organizadores la han sufrido en numerosas ocasiones.

Hace 24 años que funciona el festival, con un parón en 2009 para redefinirse. Empezó en 1992 como una feria para conseguir recursos económicos para el cine erótico, que era básicamente amateur y le costaba conseguir financiación. Fue tal el éxito, que en pocos años buscaron un recinto de mayor tamaño. Tuvieron que marchar de Barcelona porque el ayuntamiento de entonces no les permitió realizar un evento vinculado al mundo del sexo en el espacio que necesitaban. Se fueron a Cornellà, una población del área metropolitana de la ciudad Condal. En 2010, volvieron con el formato actual de salón erótico y en 2014 regresaron a Barcelona, su lugar natural. Este periplo no ha sido sencillo. Se han encontrado con dificultades, por ejemplo, en cierta ocasión les permitieron poner publicidad en el metro pero les prohibieron poner banderolas por las calles. Cabe decir que sus carteles nunca han sido explícitos. Han tenido que negociar los contenidos que se pueden ofrecer en el festival. Este año han conseguido permiso para poner puntos de suspensión. Barcelona, ciudad abierta, no ha sido tan complicada, pero en otros festivales, no se puede mostrar sexo explícito o no se puede decir la expresión “porno en vivo” pero sí la más suave “filmar una película X”. Juli Simon, director del SEB, me comenta que “a las autoridades, el sexo les da miedo”.

Luis García Berlanga, que fue presidente del festival de cine erótico en 2003, defendió el nombre de erótico para un evento que algunas voces señalan (no sin cierto tono despectivo) como pornográfico. Según me comenta Juli, fue el director de cine quien le dijo “el erotismo es un concepto que lo integra todo. Pornografía es solo una parte y el salón es mucho más”. Cierto es. El SEB incluye numerosas propuestas que van desde el sexo más tradicional hacia lo más alternativo. Ese es precisamente uno de sus objetivos: apostar por cosas diferentes dentro del erotismo. Este año, según datos de Juli, se podrán ver un 15% de espectáculos alejados de lo clásico (circo, magia, arte… vinculado a la sexualidad). Y este porcentaje va en aumento.

En esta variedad, no solo hablamos de espectáculos. El SEB abre sus puertas a otras actividades. Doy fe de ello. Este es el segundo año que organizamos el Rincón Foot Fetish, un espacio participativo donde, además de acoger a todos los fetichistas del pie que deseen jugar, visibilizamos y normalizamos esta práctica erótica. Y hay lugar para el tantra, un espacio swinger, arte erótico, cosquillas… Y un aula de sexo, con diferentes talleres para quién tenga inquietudes formativas. (Por cierto, allí mismo daré una charla el sábado 8 de octubre a las 20h sobre footfetish).

A pesar de todo esto, quizás podríamos pensar que el sexo tradicional es lo que sigue teniendo más tirón. Juli lo niega rotundamente. “Solo un 20% de visitantes son los que van buscando ese tipo de sexo, que se conocen a todas las actrices porno y buscan hacerse la foto. Otro 20% son los que van atraídos por esa oferta erótica diferente. Alrededor de un 50%, son personas que visitan el salón una vez y no vuelven. Es como quién va a ver la torre Eiffel porque hay que verla”. Por ello el SEB cuida sus campañas de imagen para llamar la atención de otro tipo de público, que es, en definitiva, el mayoritario.

Dejando hipocresías e ideas estigmatizadas a un lado, lo que el SEB propone es visibilizar y normalizar el sexo en todas sus vertientes. En eso coincidimos plenamente. Así que un año más estaré por ahí.

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El Salón Erótico de Barcelona se celebra del 6 al 9 de octubre en el Pabellón de la Vall d’Hebrón de Barcelona.
El Rincón Foot Fetish estará abierto todos los días del salón.